viernes, 6 de junio de 2014

Ya no sé porque me sorprendo, son las mismas palabras que utitlizas siempre, los mismos verbos, el mismo tono y el hecho de hacer notar que es imposible. Cada día pasa como un platillo en rotación interminable, a veces creo que fue mala idea mirarte más d elo debido, a veces pienso que no debi tocar tus pies o aceptar ese primer beso. 

Nos conocimos en el peor lugar de todos, en donde las mascaras estan a la orden del día, y en donde decir te quiero o te extraño, no significa nada. Sí tus primeras palabras dijeron mucho y significaron aquello que me era imposible decir, pero ya es tarde, ya ha pasado el tiempo en que he querido pensarte más de lo que habitual. 

No sé cuales sean las palabras correcta o como decir algo, sin tener la inutilidad de sentir que logres entenderla. Nuestro peor enemigo ha sido el tiempo y debo confesar que es mi mejor aliado, no sé porque continuo escribiendo lo que sabes muy bien será o como mencionaste suena de despedida. 

Ya no puedo, ya el tiempo me ha quitado mucho, la espera es interminable y las ganas son muchas. No sé que decirte, no sé si lo mejor sea enviarte un e-mail diciendote que se terminó, que lamento mucho no tener tan poco tiempo para darte y tan pocas ganas de compartir contigo.  Debo ser sincera, me ha costado mucho amarte de forma que te amo, pero eres muy desconsiderado o tal ves yo muy infantil, pero estoy cansada, tengo mucho sueño y quiero dormir, quiero soñar que no he sabido nada de tus viajes, de tus idas y vueltas del mundo, de tu voz en mi odio y de que tal ves sea la ultima vez, y que tal ves hace semanas fue la ultima vez que te besé.